Diciembre ya huele a navidad.
Y es que a medida que se van acercando estas fechas vamos viendo más polvorones, turrones, chocolates y demás dulces que hacen que adelantemos los excesos de navidad cada vez más, por lo que no sólo nos excedemos comiendo en esas fechas concretas, si no que éstas cada vez se adelantan y se atrasan más. Lo que antes eran 4 días ahora es un mes donde nuestra alimentación se ve alterada.
No es necesario excederse en estas fechas y tampoco estamos obligados a comer cualquier cosa. Desde aquí te recomiendo que reflexiones bien sobre esos excesos que parece que nos vemos obligados a hacer, y que pienses en la repercusión que va a tener en ti aquello que vas a comer. Si tu alimentación es saludable (tomas un alto contenido en alimentos integrales, verduras, frutas y no tomas refinados) no te va a pasar nada si dos días comes más de la cuenta lo que normalmente no comes.
Si tu alimentación no es saludable (tomas alimentos altamente refinados, procesados, la verdura escasea en tus platos, tomas grasas de mala calidad, etc) deberías cuidarte aún más en estas fechas.
Sea cual sea tu caso, aquí te doy 10 truquitos para que estas fiestas sean aún más saludables y puedas disfrutar de ellas plenamente.
- Empieza las mañanas con un buen batido verde y no vayas a las comidas con hambre. Desayuna bien, sáciate con alimentos frescos por la mañana y evita llegar con ganas de arrasar con los entrantes.
- Recuerda todo lo que has aprendido y elige comer alimentos, no productos.
- Prepara entrantes saludables. Vamos a evitar lo máximo posible el picoteo antes de comer, pero si aún así lo hacemos es ideal que sean preparaciones ligeras y saludables como por ejemplo una ensalada de verduras, rollitos de calabacín con algún paté vegetal, hummus con crudités… mejor verduritas que empezar con platos muy recargados.
- Elige platos principales saludables. Si tu alimentación no es 100% vegetal, es ideal que aumentes en gran parte la proporción de verduras en tu plato y acompañes el plato protagonista con preparaciones suaves como plancha, wok, horno, vapor… evitando así los fritos y el exceso de salsas no caseras llenas de azúcar.
Idealmente si tomas algún cereal que sea en grano, evitaremos al máximo las harinas blancas para que nuestros alimentos sigan siendo 100% nutritivos. - Opta por bebidas saludables. El agua siempre va a ser la mejor bebida para nosotros, aunque entiendo que en días festivos nos pueda apetecer más otro tipo de bebidas. En vez de refrescos recargadísimos de azúcar y gas, puedes optar por bebidas fermentadas como la kombucha, el kefir de agua, limonada casera, zumos de verduras o batidos de frutas como aperitivo. ¡No es una obligación tomar refrescos! Y con el alcohol, mejor no abusar de él, que luego necesitarás un batido depurativo como éste para recuperarte.
- Sea cual sea tu bebida alcohólica estas navidades, recuerda servirla siempre con una buena botella de agua al lado. ¡Necesitarás hidratarte!
- Los postres… ¡Como me vas a quitar el postre! Me dirían muchos….éstos en pequeñas cantidades, nada de comerse una barra entera de turrón, que nos conocemos. Otra opción para un turrón más saludable es hacerlo en casa, es muuuy fácil. Y si se te acaban las ideas aquí tienes estos fantásticos vasitos dulces, ideales para estas navidades. También puedes servir como postre frutas digestivas como la papaya o la piña, una macedonia de frutas, bombones crudiveganos, dátiles y frutos secos. Siguen siendo algo pesados para después de comer, pero te aseguro que son mucho mejor que cualquier “chocolatina” que podamos comprar en las grandes superficies.
Una vez hayas acabado de comer, retira los alimentos de la mesa para la sobremesa… y recuerda dejar el móvil aparcado y disfrutar de tus seres queridos. ¿Qué experiencias tienes que contarles de tu pasado año? - Mantente activo y no dejes de practicar tu deporte favorito. Incluso una buena actividad después de la comilona puede ser salir a pasear con toda la familia a disfrutar del ambiente navideño. No abandones tus buenas rutinas ya creadas.
- No te martirices. Come lo que te apetezca y si te excedes compensa comiendo bien en casa durante varios días. Recuerda que vas a disfrutar de la compañía de tus seres queridos, no a comerte la cabeza por lo que como o dejo de comer.
Disfruta con cada cosa que hagas con conciencia. - Agradece tener un plato en tu mesa y toda la abundancia con la que cuentas en tu vida. Ni un 10% de la población puede gozar de ello. ¿Sabes el camino que han recorrido esos alimentos para estar hoy nutriendote? ¿Estás contento con lo que ves en el plato?
Bendice tus alimentos y tómalos con el respeto que se merecen.
Tómate un minuto de reflexión y cuéntame qué hábitos saludables vas a incorporar estas navidades.